Apenas 40 kilómetros nos separan de Santiago de Compostela, la mañana como siempre con sus brumas y neblinas, no se si es por lo cercano que lo tenemos pero tengo la sensación de que si tuviera que hacer una etapa como las anteriores de muchos km no aguantaría. Poco a poco vamos cogiendo otra vez la forma y a seguir disfrutando el camino sabiendo que hoy llegamos, que hoy se acaba si o si nuestro camino que empezamos días atrás.
Como siempre en estas etapas muchísima gente a pie, familias enteras con sus hijos, muchísimos españoles, y amiguetes ciclistas que hemos ido conociendo en todo el trayecto.
El paisaje en su linea, como de costumbre nos ofrece estampas que bien merecerían una enmarcación, postal o algún tipo de homenaje por su belleza.
Avanzamos y los hitos kilométricos nos indican que cada vez quedan menos kilómetros, cosa que te anima. Ya vas con la mirada hacia delante, mas callado que en ocasiones anteriores, la meta esta cerca y cada uno siente que ha cumplido con el objetivo de llegar, que son muchos kilómetros y se hacen duretes.
Cruzaremos riachuelos, pasaremos por bosques, aldeas y pueblos, para ir adentrandonos en un paisaje mucho mas urbano, nos acercaremos al aeropuerto y poco a poco nos meteremos sin darnos cuenta en Santiago de Compostela, y un mar de carreteras, calles, rotondas, avenidas y demás. No sin antes detenernos en el Monte do Gozo y sacarle una fotito de rigor y ver las vistas que nos ofrece.
La señalización como siempre es impecable, la sigues y te guia a tu destino. La llegada a la catedral para el que no haya ido nunca como era mi caso, impresiona, ves un lateral al que llegas por una alargada calle y te recibe una música de gaita interpretada por un joven debajo de un arco que hay en la misma calle, sales del arco y te encuentras con la plaza del Obradoiro, que grande.
Decir que antes de esto nos encontramos callejeando al cura de nuestro pueblo guiando a un grupo de jóvenes, con lo que se cumple que haya donde vayas siempre habrá alguien de Huercal, y si no ya estas tú.
Seguimos describiendo la sensación de la llegada, cada cual al encontrarse en esa plaza, y ver que ha llegado siente algo diferente. Los motivos para llegar y hacer el camino son muchos y personales. El mio es turístico deportivo, pero he de decir que cuando has logrado llegar sientes algo por dentro que te hace estar muy satisfecho contigo mismo.
Estas como diría un amigo, "que te sales de la pelleja", la sensación es de emoción, satisfacción y de poder decir a todo el mundo si señores he echo el camino con dos amigos, y lo he disfrutado un montón.
Subir esas escaleras y entrar a la catedral, verlo todo con detenimiento como a cámara lenta, subir a donde esta el apóstol, bajar a donde se supone que reposa, ver el botafumeiro, pero antes de todo esto ir a recoger nuestra compostelana, como que hemos echo todo el camino.
La cara de los tres es un poema, en ella se ve el cansancio acumulado, el sol de todo el camino, pero también se ve la satisfacción por lo logrado. Tres grandes en un sitio muy grande, je je.
Antes de la comida nos acercaremos a la estación de autobuses para comprar los billetes de vuelta, cerca de la estación, en la avenida do cruceiro, hay un bar que se llama San Carrodio, eso no es un bar, eso es un templo de la buena comida, creo que no me he comido otro menú así en la vida, por lo abundante de los platos, y el sabor de los mismos, y estoy hablando de menús de todos los días, no de bodas o similares. En apariencia el bar no es gran cosa, pero una vez sentado en su comedor te quedas que
no puedes comerte todo lo que viene en los platos, pedimos de primero mejillones, ensaladilla rusa y pasta y nos trajeron tres bandejas, que solo con dos de ellas ya habríamos comido los tres. En fin que si os gusta comer bien, este sitio es totalmente recomendable, te quedas satisfecho seguro.
En fin amiguitos, esto a sido todo, nos hemos encontrado con gente de todo tipo, hemos compartido experiencias vividas, y espero que os haya gustado el camino a través de este blog al menos la mitad de lo que nos gusto a nosotros el poder hacerlo.
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| BUEN CAMINO. |
